El cuerpo del paciente absorbe parte de la radiación que se emite al hacer una prueba diagnóstica, como una radiografía o una tomografía computerizada (TAC), pero el daño que puede producir en nuestro organismo una dosis absorbida depende del tipo de radiación que genera la prueba y de la diferente sensibilidad de los órganos y tejidos.

Comprometidos con la seguridad del paciente, en Asepeyo tomamos todas las medidas necesarias en materia de protección frente a radiaciones ionizantes. Dentro de esta línea de actuación, hemos generado un informe para nuestros pacientes con la dosis de radiación recibidas en estudios de radiología estándar y tomografía computarizada en medios propios, realizados en nuestros centros asistenciales y hospitales.

El paciente puede solicitar este nuevo informe al personal sanitario. En él se detalla la dosis de radiación recibida por el paciente en cada prueba diagnóstica realizada en nuestras instalaciones propias durante los últimos 5 años.